Descubre la experiencia de Alice en Leipzig gracias a Arqus

En el marco de la convocatoria de estancias de investigación, la Alianza Arqus, coordinada por la UGR, financia programas de intercambio de corta, media y larga duración. Estas estancias están dirigidas a estudiantes de posgrado, investigadores noveles y experimentados, y profesores universitarios en general. El objetivo es promover proyectos de colaboración ya existentes e incentivar otros emergentes en diferentes áreas temáticas. También se busca que las universidades de la Alianza Arqus intensifiquen la cooperación en materia de investigación.

Gracias a este plan de financiación, Alice Massera, estudiante de doctorado en el Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS), organismo público de investigación francés, ha disfrutado de una estancia de investigación de 3 meses en la Universidad de Leipzig. Acaba de regresar de esta movilidad y el Equipo de Comunicación de Arqus la ha entrevistado. ¡Sigue leyendo para conocer su experiencia!

¿Podrías presentarte en pocas palabras?

Me llamo Alice, soy italiana y actualmente hago un doctorado sobre neurociencia en el CNRS. Estoy redactando una tesis sobre macacos.  Se trata concretamente de un estudio longitudinal sobre los efectos de la adversidad social temprana. Estoy en mi tercer año de doctorado y debería poder defender mi tesis en abril. Durante mis estudios, ya he tenido la oportunidad de irme de Erasmus dos veces y creo que es realmente importante viajar al extranjero.

Hiciste tu estancia en Leipzig a través de Arqus. ¿Cómo descubriste la alianza?

Mi Universidad, la Claude Bernard Lyon 1, me reenvió un correo electrónico que les había llegado con información sobre la convocatoria de estancias de investigación. Solo quedaban 3 semanas para inscribirse, pero ya sabía que quería pasar una temporada en el extranjero durante la tesis, así que no le di muchas y empecé a preparar el viaje. Gracias a aquello pude pasar tres meses en la ciudad alemana de Leipzig.

¿Por qué elegiste Leipzig?

Conozco a algunas personas de Leipzig que trabajan en mi laboratorio y sus investigaciones giran en torno a los chimpancés. Tras hablar con ellos, me dieron ganas de irme allí. Otras personas ajenas al laboratorio también me recomendaron esta ciudad. Me habían dicho que era interesante, tanto desde un punto de vista profesional como personal. Como no sabía nada de Alemania, me preguntaba cómo sería estudiar y vivir allí. Pensé que esa experiencia me aportaría mucho como estudiante y como persona, y, por supuesto, que quedaría muy bien en mi CV.

¿Qué le ha aportado esta experiencia de cara a su tesis?

En Francia, trabajo principalmente con macacos, pero más adelante me gustaría centrarme más en humanos, sobre todo en bebés. En Leipzig tuve la oportunidad de estudiar estos otros ámbitos y, además, pude utilizar otras técnicas de investigación e instrumentos distintos. Fue interesante y gané experiencia práctica. Además, pude conocer a muchos investigadores, lo que resultó enriquecedor para ellos y para mí. Ellos me mostraron cómo llevan a cabo sus investigaciones y me dieron consejos para las mías. Fue una buena experiencia para establecer contactos.

¿Cómo se financió la estancia?

Conseguí unas cuantas becas tanto antes de empezar la estancia como cuando llegué allí. Esto me permitió poder seguir costeando mi piso en Lyon y vivir a la vez en el extranjero, lo que no resulta especialmente asequible. Está muy bien poder recibir este tipo de ayudas.

¿Recomendarías este tipo de movilidad a otros estudiantes de doctorado?

Sí, creo que todo el mundo debería hacerlo. En Italia es muy común irse al extranjero, es más, nos animan a hacerlo para conocer nuevos lugares. Yo creo que aquí los profesores no nos empujan tanto a ello. De hecho, soy la única que ha tenido este tipo de experiencias en mi Universidad. Cuando estás haciendo una tesis, a menudo piensas que no tienes tiempo para hacer una estancia en el extranjero. Sin embargo, creo que la investigación se basa en la comunicación y en la retroalimentación.

El hecho de poder elegir la duración de la movilidad (entre 2 semanas y 3 meses) da mucha flexibilidad y es bastante interesante. Aunque no tenga un impacto directo en la investigación para la tesis, conocer a gente de una cultura diferente es muy enriquecedor para nuestro futuro. Creo que también es estupendo hacerlo a través de Arqus. Así, sabes que estás seguro y que tienes financiación. Si alguien se lo está planteando, que no lo dude. ¡Es el momento de dar el paso!

Traducción de la noticia de Doriane Duvault, Responsable de Comunicación de la Alianza Arqus en la Universidad Claude Bernard Lyon 1.