11 de febrero: un recordatorio del papel crucial de las mujeres y las niñas en la ciencia y la tecnología

La representación del mundo, como el mundo mismo, es obra de los hombres; lo describen desde su propio punto de vista, que confunden con la verdad absoluta.

Simone de Beauvoir

Tanto la ciencia como la igualdad de género son vitales para la consecución de los objetivos de desarrollo acordados internacionalmente, incluida la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. En los últimos 15 años, la comunidad mundial se ha esforzado mucho por inspirar e involucrar a las mujeres y las niñas en la ciencia. Sin embargo, las mujeres y las niñas siguen estando excluidas de participar plenamente en la ciencia… Con el fin de lograr el acceso y la participación plena y equitativa de las mujeres y las niñas en la ciencia, y seguir logrando la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y las niñas, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 11 de febrero como el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia en 2015

Organización de las Naciones Unidas

Las mujeres representaron alrededor de uno de cada tres (33%) investigadores en 2018. Han alcanzado la paridad (en número) en las ciencias de la vida en muchos países e incluso dominan este campo, en algunos casos. Sin embargo, las mujeres siguen siendo minoría en la tecnología de la información digital, la informática, la física, las matemáticas y la ingeniería. Estos son los campos que impulsan la revolución digital y, por tanto, muchos de los empleos del futuro. Todavía son pocas las jóvenes que se matriculan en las ingenierías: esto se debe principalmente al papel central de los estereotipos de género que pueden afectar a la elección de la universidad, y que están tan extendidos que se considera un hecho natural que todavía haya pocas mujeres en la ciencia.

El término «estereotipo» fue acuñado en 1798 por un impresor francés llamado Didot, y se refería a las copias impresas en papel prensado. En 1922, W. Lippmann lo aplicó a la opinión pública, refiriéndose al hecho de que las personas suelen recurrir a simplificaciones para orientarse en un contexto desconocido. Los estereotipos nos ayudan a enfrentarnos a un mundo diferente o desconocido y se convierten en algo fundamental cuando este mundo se ve amenazado.

Un estereotipo muy común se refiere a la supuesta incapacidad de las mujeres para enfrentarse a la lógica y las matemáticas. Muchos estudios científicos han demostrado que la supuesta inferioridad de las mujeres no se debe a una diferencia en el cerebro de ambos géneros, sino que es en sí misma un prejuicio (Ceci et al., 2009). Recientemente, tres científicas estadounidenses han llevado a cabo una investigación sobre las diferencias de género en el cerebro de las niñas y los niños durante el desarrollo cuando se trata del aprendizaje y el uso de las matemáticas (Kersey et al., 2019). A partir de los datos experimentales recogidos en los niños y niñas objeto de estudio, demostraron que las funciones neuronales relacionadas con la comprensión de las matemáticas son similares entre géneros.

Las niñas deben hacer frente a los retos del futuro, tener competencias cada vez más transversales, hacer valer una cultura de igualdad de género para una sociedad inclusiva y sostenible. Un mayor acceso de las niñas a las disciplinas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) puede reducir realmente la brecha de género existente. Esta conexión entre las niñas y STEM resulta muy interesante si se declina en la perspectiva de la sostenibilidad del Objetivo 5 – Lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y niñas – de la Agenda 2030 (Xausa et al, 2020).

Dentro de Arqus varios socios ya tienen iniciativas en marcha para abordar la cuestión del bajo número de mujeres jóvenes que se sienten atraídas por las disciplinas STEM y que se incorporan a ellas en todo el mundo; por ejemplo, la iniciativa «Quiero ser Ingeniera» en Granada. La Línea de Acción 2: Ampliación del acceso, la Inclusión y la Diversidad, con su grupo de trabajo dedicado a «Las mujeres en STEM», está trabajando para compartir estas iniciativas y crear directrices para una mayor acción local, como se prevé en las «Cartas para la igualdad de género, la inclusión y la sostenibilidad» (en desarrollo) que representan los fundamentos de la Alianza.

En los eventos y materiales de formación desarrollados en Arqus, en particular para los futuros profesores de educación primaria y secundaria, se dedica una cuidadosa atención a las cuestiones relacionadas con el género, mediante la sensibilización y la facilitación de recursos. Los socios de Arqus han participado activamente en varios eventos en los que participan destacadas científicas e ingenieras como modelos a seguir, como el seminario web y el debate académico, organizados por el grupo de trabajo «Las mujeres en STEM» durante las iniciativas desarrolladas para celebrar el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia de 2021.